Un gol de oro de Ana Sierra en la prórroga dio el triunfo a las vallisoletanas ante el Canfranc-Tres Cantos en la final de la European League (2-1).
El Munia Panteras volvió a alzarse con el título de campeón de Europa. En esta ocasión en Canfranc (Huesca), donde este domingo se impuso en la final de la Women European League, la máxima competición continental por clubes del hockey línea, al cuadro que ejercía como local, el Tres Cantos. Lo hizo en un partido sufrido, emocionante y que se resolvió en la prórroga, con un gol de la capitana vallisoletana, Ana Sierra. Es el cuarto título del CPLV femenino, tras los de 2018, 2019 y 2023, con lo que reedita triunfo.
La final comenzó con cierto respeto entre ambos equipos. Tres Cantos-Canfranc y Munia Panteras habían acabado su partido de la fase de grupos en la tanda de penaltis y tanto madrileñas como vallisoletanas sabían que un fallo podía costar un título. Las de Patrick Sebek esperaron unos minutos para comenzar a presionar arriba y eso les dio la pastilla.
Gracias a ello, llegaron las ocasiones, como una clara de Ana Sierra y Sonia Abón, a la que no llegó esta última por poco. Era el minuto 10 y el cuadro pucelano doblaba en lanzamientos a su equipo. Sonia y Ana tuvieron otras dos seguidas, que evitó la portera del Tres Cantos, Cristina Ostafiychuk, que mantenía a su equipo con el empate.
A pesar de las ocasiones, varias, y de la posesión, el primer power play de la final fue a favor de las tricantinas, que no pudieron batir a María Sierra. La expulsión fue polémica, como volvió a serlo la segunda, de nuevo en contra de las vallisoletanas, ya al filo del descanso, al que se llegó con 0-0 y una menos aún del Munia Panteras.
Las pucelanas volvieron a defender bien la inferioridad pero solo un minuto después llegó la tercera en contra, lo que obligaba a otro esfuerzo defensivo muy seguido. El físico podía hacer mella en un equipo que afrontaba su sexto partido en tres días. E hizo, con un lanzamiento de Vega Muñoz, que no pudo retener María Sierra y que Luana Granado
aprovechó. Quedaban 15 minutos de partido y tocaba remontar.
Y a ello se pusieron las vallisoletanas, presionando, recuperando el disco y volviendo a tener ocasiones con igualdad de jugadoras en la pista. Las Panteras encerraron a su rival, tuvieron oportunidades de todos los colores, pero no encontraban el gol. De hecho entraron en el minuto final con ese 0-1, arriesgando ya con portera-jugadora. Y el riesgo, la presión y las ocasiones tuvieron su premio a 27 segundos del final, con un lanzamiento lejano de Ana Sierra a la misma escuadra. Empate y a la prórroga.
En ella, con gol de oro, ambos conjuntos se lanzaron a por ese premio. Comenzaron intentándolo las madrileñas, con buenas respuestas de María Sierra; para coger el testigo las vallisoletanas, que seguían doblando en lanzamientos a su rival. Elisa Díez rozó el tanto. Justo antes de que Ana Sierra cogiese de nuevo la pastilla en su campo y se lanzase a por el gol, lográndolo de nuevo de un tiro lejano, esta vez por un lateral. La diana daba el título europeo, por cuarta ocasión, al CPLV.